sábado, 24 de marzo de 2012

¡Este niño está alunao!


En Navezuelas se utiliza esta expresión cuando la luna influye sobre los bebés recien nacidos y no concilian el sueño ni de noche ni de día, provocando en ellos,  cuando estaban "cogidos por la luna", un estado de nerviosimo, histeria, risas, lloros, vomitonas ect... la solución era sencilla irte al carpintero o al herrero del pueblo y que te hicieran una luna para que te la colgaran en el cuello y así evitar el influjo selenita.
En las Hurdes por ejemplo,tambien se utiliza este término, así aparece en un artículo de la revista Folklore de Felix Barroso Gutiérrez titulado "Por tierras de las Hurdes. La tía Teresa" se habla así de los alunaos:
"...Otra cosa eran los alunaos, que cogía a los niños pequeños y, entonces, había que ponerles un Cuarto. Antes había como unas perras gordas que tenían cruces, que eran los Cuartos. Yo se los puse a todos los mis hijos. A la Avelina, que no se los puse de primero, se me tumbó de la luna y bien creía yo que se me moría. Nada más echaba apostema por el culo. Me dio las jieles pa criarla. Luego, ya le puse dos, tres, cuatro cuartos, pero... ¡nada!, no se ponía bien. Ahora, una noche estábamos en la cama y se echó a vomitar y a cagar toda. Y le digo al mi hombre, a Vitorio, que en gloria esté: "-Mira el calandario, a ver en qué cuarto estamos”. Pues resulto que eran los últimos días de la luna del consumo. Con que le puse un cuarto sólo y aquello fue mano santa; con aquello sanó. Yo creo bien en los cuartos, porque la mi Avelina se sanó gracias a ellos, ya que estaba como un jigo seco, no me comía ni un bocao, estaba siempre escorrompía y se vomitaba toda. En cuantis venía la luna nueva, se cagaba y se vomitaba en la cama. y con la luna llena, igual, y asina con todos los cuartos. Pero una vez que le acerté con el cuarto aquella noche, sanó y hasta hoy”.

Fuentes: Revista Folklore.Fundación Joaquín Díaz.
Año: 1993 - Tomo: 13a - Revista número: 149
Páginas en la revista: 169-173
Autor: BARROSO GUTIERREZ, Félix.
Título del artículo: POR TIERRAS DE LAS HURDES: LA TIA TERESA.